La monjita grosera

En un convento de Perú habían cuatro monjitas de las cuales una de ellas era bien grosera. Un dia las otras monjas ya estaban hartas de las groserias de la monjita, y cuando ella no estaba las otras tres monjitas comentaban. Una de ellas dijo

"cuando vuelva a decir una groseria nos levantamos y nos vamos y la dejamos hablando sola".

Cuando estaban comiendo las cuatro monjitas una de ellas dijo

"si hubiera guerra yo mandaria un camion lleno de alimentos",

otra dijo

"yo tambien si hubiera guerra mandaría un camion lleno de medicamentos",

otra dijo
" si yo tambien si hubiera guerra yo mandaria un camion lleno de ropa"

y la monjita grosera dijo

"si yo tambien si hubiera guerra mandaría un camion lleno de putas para los soldados"

en ese momento las otras monjitas se levantaron y dijo la monjita grosera

"no esperense todavía no traigo el camión".